Como parte de una conferencia para inversionistas esta semana, Sony anunció un plan de 3 años que involucra reducir su participación en el mercado de televisores y teléfonos inteligentes y apostar más por la marca PlayStation, a fin de obtener ganancias en vez de lo opuesto: saturar el ámbito de las pantallas y los smartphones, pero con copiosas pérdidas.
Las ventas por concepto de Bravia y Xperia bajarán 30% durante el plazo establecido, pero PlayStation deberá recaudar, por sí solo, más de $13,000 MDD, para incrementar las ventas de la división 25%, lo que la convertirá en el punto donde convergerán productos de video y musicales, lo que aunado al boyante negocio de sensores fotográficos Sony, deberá bastar para devolver a Sony a las finanzas saludables.
El valor accionario de Sony respondió bien al anuncio, ya que ayer alcanzó casi los $22 USD por activo, aunque hoy se ubica en $21.66 USD.
El PlayStation 4 salió a la venta el año pasado, enfocado casi por completo en los juegos, lo que le dio una pronunciada ventaja. Sony ha vendido 13.5 millones de unidades a tiendas, mientras que el Xbox One sólo ha comercializado 10 millones de sistemas .
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