Activision arrojó buenos resultados ayer durante su informe de operaciones, declaró una recaudación trimestral de $1.32 mil millones de dólares. Sin embargo, el director general, Bobby Kotick, advirtió que el próximo año fiscal traerá consigo múltiples desafíos.
Kotick y el director financiero, Dennis Durkin, mencionaron la amenaza de nuevas y bien capitalizadas compañías que entraron al mercado recientemente, con lo que probablemente se referían a Koch Media y a su brazo de publicación, Deep Silver.
Otro factor a considerar es el debut de Disney Infinity a mediados de agosto, el cual pondrá a prueba la supremacía de Skylanders. Además, este año no habrá un estreno del tamaño de Diablo III y, de hecho, saldrán menos títulos de aquí al otoño.
Por su parte, Eric Hirshberg, director general de Activision Publishing, mostró poco entusiasmo por el Wii U y, al igual que otras compañías antes, demandó mejores ventas.
Así las cosas, Activision adoptará una aproximación cautelosa, aunque se verá beneficiado por estrenos simultáneos en 2 generaciones, tales como los de Destiny y Call of Duty: Ghosts, sin mencionar los beneficios que pueda traer el nuevo proyecto de Blizzard.
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