Como parte de la entrevista que ofreció a un portal británico en el marco del lanzamiento del PS4, Andrew House, director general de Sony Computer Entertainment, confesó haberse sentido confundido cuando Microsoft decidió implementar las controvertidas políticas de funcionamiento originales del Xbox One, pues eso obligó al fabricante japonés a aclarar estrategias que no contemplaba cambiar.
En un primer momento, el Xbox One iba a funcionar con conexión permanente e iba a restringir la compraventa de títulos usados con candados digitales. Sony aprovechó el descontentó que esto generó y, durante el E3 pasado, anunció que respetaría los esquemas tradicionales de libre préstamo y compraventa física con el PS4.
"Eso no fue algo que nosotros decidiéramos, fueron los movimientos que la competencia estaba haciendo.", explicó House. "Ésa sigue siendo la sorpresa más grande para mí lo visceral que fue la reacción de los consumidores. Pero el hecho de que tuviéramos que aclarar algo en un área que considerábamos sentido común todavía me tiene rascándome la cabeza.", añadió.
El directivo insistió en que su compañía nunca consideró cambiar el modelo de negocios físico tradicional y en lo sorpresivo que fue aclarar algo que se daba por hecho: "Lo que me sorprendió más fue tener que aclarar que mantendríamos el status quo en áreas que dábamos por sentadas."
A mediados de año, Shuhei Yoshida, presidente de Sony Worldwide Studios, reconoció que los errores de Microsoft beneficiaron la estrategia del PS4. "No es que las políticas de nuestro hardware se decidan estrictamente con base en una reacción de los usuarios como esa, pero cuando estábamos pensando sobre lo que teníamos que exponer y cómo hacerlo, fue una fuente muy útil.", explicó Yoshida.
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