CD Projekt Red: sexo y violencia deben tener justificación

Pese a que casi todo el entretenimiento del pixel tiene cimientos en la violencia, el sexo se ha mantenido como un tabú al que pocos tienen ánimo de enfrentar, y cuando algún estudio lo hace, los resultados suelen ser genuinamente pueriles, dado que según Marcin Iwinski, director general de CD Projekt Red, la inclusión de dicho elemento se basa en las hormonas del desarrollador y no tanto en una justificación tangible dentro del argumento.

El directivo señala que The Witcher y Game of Thrones son excelentes ejemplos de un contexto en el que sexo y violencia encajan perfectamente, porque son obras que se sustentan en la vida durante el Medioevo. “Cuando estás desarrollando un concepto, tienes que mirarlo desde la perspectiva de calidad para un producto; si el recurso [de sexo y violencia] está sobreexplotado, es posible que termine como una producción mediocre, porque se justifica en una pantalla que estimula el morbo más que tu intelecto”, dice Iwinski, optimista por la tendencia en la industria que está eliminando todas las debilidades y trucos baratos para dar paso a la sofisticación.

Cuando se reveló que The Witcher 2 tendría una fuerte carga de escenas con contenido sexual, la crítica no se hizo esperar, y algunos grupos de padres incluso lo condenaron por recurrir a “tácticas sucias que atrapan a los adolescentes”, aún cuando la clasificación del juego es para mayores de edad. El representante de CD Projekt Red replica que tiene mucho que ver con la mentalidad de cada región del mundo, pues el juego tuvo buena recepción en Europa y jamás se descalificaron las escenas de sexo, mientras que en América se convirtió en un tema controvertido. El argumento de Iwinski se basa en considerarlo un aspecto que daba credibilidad al mundo de fantasía, en el hecho que “The Witcher no es Dungeons & Dragons donde los besos están prohibidos, ni tampoco es el mundo de Barbie, es un testamento, así como Game of Thrones, de que el sexo tiene sentido en un entorno medieval, humano y conflictivo, y tiene el mismo sentido en la actualidad”.

Al final, el director general del estudio polaco asegura que el sexo seguirá siendo tema recurrente, en mayor o menor medida, “algunos optarán por el camino fácil de presentar un flamante auto con chicas sensuales en ropa entallada, mientras otros preferirán darle sustento con la trama”.