Desde hace un par de años el mundo de los videojuegos dejó de pertenecer exclusivamente a las consolas; la PC está reviviendo su gloria, los juegos de las redes sociales tienen una gran influencia y los títulos para smartphones y tablets se apoderaron de un gigantesco mercado. Estas dos últimas plataformas trajeron consigo las microtransacciones, comunes en los juegos gratuitos para generar ganancias y que han sido todo un éxito.
Peter Moore, director de operaciones de EA, cree que este modelo de negocios es el que en el futuro dominará a la industria de los videojuegos: "Pienso que las microtransacciones estarán en todos los juegos, pero el acceso al mismo será gratuito; es inevitable que esto pase en unos cinco o diez años. El modelo es similar a ir a una tienda, no me cobran por caminar ahí, disfrutar de la música o ver la ropa, pero si quiero comprar algo, tengo que pagar por ello.
"Actualmente mido nuestro negocio en los millones de personas que han comprado uno de nuestros juegos. Tal vez cuando me retire cientos de millones de personas estarán jugando a pesar de que ninguna de ellas compró el juego. Obtenemos seis centavos en ganancias al día por cada usuario; la mayoría jamás nos pagará un centavo, pero otros pagarán por ser el número uno en un título con 55 millones de jugadores," explica Moore.
Esto no significa que los títulos de precio completo dejarán de existir, todo dependerá del tipo de gameplay que manejen, pero una cosa son juegos de $60 dólares que sólo ciertas personas comprarán, y otra es un juego gratuito que todos los que tengan una consola estarán tentados a probar -y una buena parte de ellos pagará por al menos un aditamento-. Probablemente los desarrolladores encuentren la forma de adaptar todos sus títulos al esquema de las microtransacciones.
"Bien podría haber juegos que sobrevivan al modelo y sigan costando $60 dólares, pero creo que el crecimiento real está en traer billones de personas a la industria y llamarlos gamers. A los veteranos no les gustará escuchar esto, a ellos les gusta proteger lo que sienten que ayudaron a construir -y con todo derecho-. Hay muchos títulos que están elevando al gamer de un adolescente encerrado en su cuarto jugando títulos llenos de testosterona a un punto donde todos son gamers; si puedes mover tu dedo índice de cierta manera, entonces eres un gamer. Así tiene que ser," concluye Moore.
Efectivamente, más de un gamer estará en desacuerdo con las palabras de Moore, pero hay que resaltar que la industria está reportando pérdidas y necesita una alternativa para salir a flote; todo apunta a que esta salvación está en formas de juego que resulten llamativas para cada gusto, desde los disparos hasta el ejercicio. Esto significa que los videojuegos están inmiscuyéndose en aspectos de nuestras vidas que las primeras generaciones de la industria nunca habrían imaginado.
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