Ante el inevitable naufragio de 38 Studios que cobró como víctimas a los empleados de Big Huge Games, el presidente de Epic, Mike Capps, decidió rescatar a tantos desarrolladores como fuera posible, empleándolos en su compañía para crear grandes proyectos que convenientemente, estaban en los planes de expansión de los creadores de Gears of War.
El miércoles [30 de junio], los líderes de Big Huge Games me contactaron. Querían iniciar una nueva compañía y mantener unido parte del talento que comenzaba a dispersarse tras los despidos, esperanzados de poder usar una propiedad intelectual de Epic como punto de inicio para crear un juego nuevo, comenta Capps, agregando que toda la gente de Epic se conmovió ante la fuerza de voluntad de los exempleados de Big Huge Games y su empeño por seguir unidos. Los autores del Unreal Egine sintieron empatía de inicio, pues sabían que sus homólogos buscaban crear un demo, pero no tenían la infraestructura para ofrecer algo sólido a cualquier distribuidor y que de ahí se les financiara.
Capps cuenta que en una coincidencia fortuita, los directores de Epic habían conversado esa mañana de que les encantaría pautar más proyectos, pero aún si el estudio estaba expandiéndose poco a poco, hacía falta un crecimiento dramático de talento con vasta experiencia, si es que esa idea se iba a hacer realidad. La llamada de Big Huge Games resulto certera, pues con ello Capps y su gente consideraron desafiar al destino, tomando al difunto estudio para crear uno nuevo con sede en Baltimore.
Por supuesto, pasará algo de tiempo antes de que se den noticias del proyecto en que trabajará esta nueva división de Epic, pues Capps explica que hace falta encontrar espacio para la oficina, comprar equipo, conseguir el suficiente arsenal Nerf y unas cajas de Dr. Pepper. El problema es que muchos exempleados de Big Huge Games llevan demasiado tiempo sin recibir paga, y no pueden esperar tanto a que se concreten cosas, así que mientras trabajarán como agentes externos. En este respecto, el director de Epic dice que contratará tanta gente como sea posible, y ante la falta de detalles que afinar, pide paciencia, tanto a la audiencia como a la industria y a la gente de Big Huge Games.
Curiosamente, la administración de Epic demuestra modestia de acoger a los refugiados del huracán 38 Studios, expresando que va de acuerdo con su filosofía, y es un poco de ayuda para colegas en tiempo de necesidad, quienes por cierto también están recibiendo auxilio de Zynga East y Zenimax Online.
Big Huge Games fue fundado por Jason Coleman, David Inscore, Brian Reynolds y Tim Train en el año 2000; THQ adquirió el estudio en 2008, para venderlo en 2009. La compañía del beisbolista Curt Schilling, 38 Studios, realizó una adquisición posterior, incluido el entonces prematuro Kingdoms of Amalur: Reckoning. Cuando 38 Studios se quedó en bancarrota, Big Huge Games se fracturó en consecuencia. Dado que Kingdoms of Amalur ahora pertenece al distrito de Rhode Island, es incierto si se podría llegar a un acuerdo para continuar una posible secuela o retomar los trabajos de Copernicus, proyecto MMORPG que en estética y concepto prometía mucho; claro, en caso de que diera tiempo, pues la gente que conformaba Big Huge Games de todos modos estará muy ocupada con cualquier proyecto que les asigne Epic.
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