En la sección bursátil del portal de THQ, la agobiada distribuidora californiana, misma que enfrenta toda clase de dificultades financieras desde hace aproximadamente un año, insinuó a sus inversionistas que podría poner en marcha un proceso de reducción de acciones con el fin de seguir cotizando en la bolsa de valores. Cabe recordar que hace algunos meses, NASDAQ advirtió a THQ que si el valor de sus activos no superaba un dólar, sería expulsado.
La reducción será en proporciones de 1:2, 1:5 y 1:10. ¿Qué significa esto? Que si alguien tiene dos acciones, se le canjearán por una con el doble de valor; si alguien tiene cinco, se le canjearán por una con cinco veces el valor; lo mismo pasará con quien tenga diez acciones, y así sucesivamente. Para los inversionistas las cosas se mantendrán igual, pero desde la perspectiva de la dinámica financiera, el que THQ tenga menos activos en circulación supone un aparente incremento en su precio.
De acuerdo con especialistas, este es uno de los últimos recursos a los cuales puede recurrir una compañía, cuando su situación financiera es problemática. Si pese a ello THQ sigue sufriendo para mantener un costo por acción de un dólar, NASDAQ intentará sacarlos de la bolsa y la distribuidora verá mortalmente sesgada su percepción de capital.
La crisis de THQ es atribuible, en buena medida, a su dependencia de juegos licenciados con pobres ventas y malas evaluaciones. Luego de cerrar múltiples estudios, la desarrolladora decidió abandonar dicha estrategia y concentrarse sólo en sus franquicias más prometedoras, pero no será rentable en varios años y eso si todavía puede revertir su condición.
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