Pese a su masivo anuncio de títulos, un nuevo color, atributo de grabación en 3D y el Slide Pad, Nintendo y su portátil experimentaron una grave desaprobación bursátil por parte de los inversionistas nipones, lo que tiró el valor de sus acciones 5%; así lo reportó la agencia noticiosa británica, Reuters.
Esto sólo significa una cosa: los que ponen el dinero al interior de la Gran N no creen que la estrategia ayude en lo absoluto, y es que, de acuerdo con Makoto Kikuchi, director general de la junta de consejeros financieros Myojo Asset Management, Nintendo tuvo éxito al atraer gente que no jugaba, pero sus necesidades ya no son saciadas por Nintendo, están felices jugando en sus teléfonos móviles.
Durante la semana del recorte de precio, la demanda de 3DS se proyectó a 200 mil unidades en Japón, pero esta volvió a caer a 55 mil a los pocos días, así que la única salida posible para la compañía de Kioto será dejar de concentrarse en títulos portátiles y volver a los juegos para Wii y familiares, agregó Kikuchi, aunque advirtió que, por ahora, no se anticipa un cambio de dicha naturaleza.
Para rematar el oscuro martes financiero y alimentar la mala reputación que el 3DS ya ostenta, las acciones de Capcom cayeron todavía más, tras anunciarse que dos de sus títulos, Monster Hunter 4 y Monster Hunter Tri G, serían lanzados en dicho sistema. La jornada cerró con un traspié de 8.3% en el valor de los bonos de participación de Capcom.
En conjunto, el costo de las acciones de Nintendo ha caído 50% durante este año, lo que obligó a la compañía a reconsiderar sus expectativas de crecimiento y ubicarlas en su nivel más bajo de las últimas tres décadas.
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