Quién no ha escuchado del 21 de Diciembre de 2012 y de las teorías que afirman que en ésta día se puede dar desde un cambio en el orden social hasta aquellas que afirman que habrá un cambio en el orden cósmico de las cosas o peor aún, el fin de los tiempos (o al menos del nuestro) puesto que es hasta donde llega el calendario Maya; e incluso hay quienes aún van más lejos y vinculan dicha fecha con las profecías de Nostradamus, el Código Secreto de la Biblia y demás textos o símbolos ligados a la profetización y al misticismo.
No es la primera vez en la relativamente corta historia de la humanidad que se habla del fin del mundo, del tiempo, de la vida o del universo mismo. Coincidentalmente todas las culturas y creencias -antigüas y modernas- tienen su relato o visión de cómo es que las cosas llegarán a su fin y quizás esto se podría atribuir más que nada a que en nuestra naturaleza radica el gusto por imaginar cómo es que el mundo, nuestro mundo, dejará de existir.
Entre todos estos mitos, relatos, historias y teorías, hay uno en específico que me parece de lo más interesante y apasionante en muchos aspectos: El Ragnarok, la versión de la Mitología Nórdica del Apocalipsis cuyo nombre podría interpretarse como "El Destino de los Dioses" el cual será una batalla que será supuestamente emprendida entre los Dioses (los Æsir), liderados por Odín y los Gigantes (los Jotuns) liderados por Loki. No sólo los dioses, gigantes, y monstruos perecerán en esta conflagración apocalíptica, sino que casi todo en el universo será destruido.
Prólogo
El Ragnarok se detonará con los siguientes hechos:
- El nacimiento de las tres criaturas más malvadas y poderosas, descendientes de Loki y Angrboda, llamados: Jormundgander (serpiente inmensa, de la cual se dice que es tan larga que una vez extendida, su cabeza y cola llegan a los limites opuestos del mundo), Fenrir (un lobo gigante, el cual es encadenado por medio de trampas y una cinta irrompible por los dioses, puesto que éstos saben que su sola existencia es señal de la llegada del Ragnarok) y Hel (giganta mitad mujer hermosa, mitad cadáver putrefacto y maloliente cuya morada radica en Helheim, que no es otra cosa que el infierno para los nórdicos)
- La muerte de Balder, y el castigo de Loki.
Balder, el hijo más hermoso y generoso de Odín, de repente comienza a sufrir pesadillas (cabe mencionar que en la Mitología Nórdica los dioses son mortales y su vida y poder son mantenidos mediante el consumo de un fruto divino, por lo cual les es indispensable dormir y comer) en la cuales se ve a sí mismo muerto, dichas pesadillas a la larga le empiezan a robar la belleza y deja de ser un joven hermoso y agradable y se convierte en una persona callada, ojerosa, malhumorada y taciturna.
Como todo padre, Odín preocupado va a Helheim a preguntar a Hel cómo es que morirá su hijo mientras que su madre, la diosa Frigg, comienza un recorrido en el cual hace jurar a todas las cosas de éste y del otro mundo que nunca jamás herirán a su hijo, y todos juran. Todos
a excepción del muérdago, pues la diosa lo considera inofensivo.
Pasa el tiempo y en una ocasión en que se encontraban reunidos todos los dioses, Balder comienza un juego con ellos que consiste en que le lancen lo que quieran y que no saldrá herido, puesto que nada puede dañarlo. Loki, furioso al ver que nada de lo que le lancen le hace el mínimo daño puesto que todas las cosas juraron nunca hacerle un solo rasguño, se disfraza de una mujer anciana y va con Frigg, interrogándola sobre Balder y obteniendo la información de que únicamente el muérdago no juró jamás lastimarlo. Loki, como todo buen dios timador y de las trampas, se las arregló para engañar al dios Höðr (el cual es ciego) y poner en sus manos un arco equipado una flecha que en su punta tenía un muérdago
Loki hace que el dios ciego apunte y dispare matando a Balder.
Los dioses observan en silencio el cuerpo de Balder yaciendo sin vida, pues saben que el Ragnarok se cierne sobre ellos.
Los dioses castigan a Loki, atándolo con las vísceras de uno de sus hijos a tres bloques de piedra, convirtieron las ataduras en hierro y se colocó una víbora sobre su cabeza de modo que el veneno de esta goteara sobre su cara. Sigyn, su esposa, se sienta junto a él y recoge el veneno de la serpiente en un cuenco de madera, pero cuando se llena debe arrojar el veneno, y en esos momentos el veneno cae sobre el rostro de Loki. El dolor es tan terrible que se retuerce provocando temblores de tierra. Su castigo durará hasta el ocaso de los dioses, cuando por fin logre romper las cadenas junto con su hijo, el lobo Fenrir.
Desarrollo
El Ragnarök será precedido por el Fimbulvetr, el Invierno de Inviernos: tres inviernos sucesivos se seguirán uno a otro sin verano. Como resultado, explotarán los conflictos y las peleas, y todos los mortales desaparecerán.
Después de una persecución perpetua, el lobo Skoll y su hermano Hati finalmente devorarán a la diosa Sól y a su hermano Máni respectivamente. Las estrellas desaparecerán de los cielos, sumiendo a la tierra en oscuridad.
La tierra se estremecerá tan violentamente que los árboles serán arrancados de raíz y las montañas caerán; cada unión y cada eslabón se romperá y se separará, liberando a Loki y su hijo, el lobo Fenrir. El terrible hocico de este lobo se abrirá tanto, que la parte inferior de su quijada raspará contra la tierra y la parte superior de su quijada ejercerá presión contra el cielo. Las llamas bailarán en sus ojos y saltarán de sus fosas nasales.
Eggthér, el vigilante de los Jotuns, se sentará en su tumba y rasgará su arpa, sonriendo severamente. El gallo rojo Fjalar cantará a los gigantes y el gallo de oro Gullinkambi cantará a los dioses. Un tercer gallo2, de color rojo óxido, levantará a los muertos en Hel.
Jormundgander, la serpiente de Midgard (la tierra de los hombres), se levantará del lecho profundo del océano para dirigirse hacia la Tierra, torciéndose y girando en furia sobre sí misma, causando que los mares se alcen y azoten contra la tierra. Con cada respiración, la serpiente arrojará veneno, salpicando la Tierra y el Cielo con él.
De las tierras del este, el ejército de Jotun, conducido por Hrym, saldrá de su hogar en Jotunheim y navegará la espantosa nave Naglfar (fabricada con las uñas de hombres muertos), que serán liberados por el tsunami y la inundación, hacia los campos de batalla de Vigrid.
Desde el norte, una segunda nave fijará sus velas hacia Vigrid, con Loki, ahora desatado, como timonel, y los horrorosos habitantes de Hel como peso muerto.
El mundo entero estará en guerra, el aire temblará con los ruidos, fragores y ecos. En medio de esta agitación, los gigantes de fuego de Muspelheim, conducidos por Surt, avanzaran hacia el sur y romperán en dos el propio cielo, cerca de Vigrid, dejando todo a su paso quemándose en llamas. Mientras cabalgan hacia Bifrost, el puente del arco iris, éste se agrietará y se romperá detrás de ellos. Garm, el perro del infierno, también conseguirá liberarse. Él se unirá a los gigantes de fuego en su marcha hacia Vigrid.
De esta manera, todos los Jotuns y todos los habitantes de Hel, Fenrir, Jormundgander, Garm, Surt y los hijos ardientes de Muspelheim, se reunirán en Vigrid. Todos ellos llenarán el vasto terraplén que se extiende a ciento veinte leguas en cada dirección.
Mientras tanto, Heimdall, siendo el primero de los dioses que verá a los enemigos acercarse, soplará su cuerno Gjallarhorn, que sonará con tal ímpetu que será oído a través de los nueve mundos. Todos los dioses despertarán e inmediatamente se reunirán en consejo. Después Odín montará su caballo Sleipnir y galopara a la morada de Mimer para consultarle por acerca de la esperanza de su pueblo y de él mismo.
Entonces, Yggdrasil, el árbol del mundo, se sacudirá desde la raíz a la punta. Todo en la tierra, el cielo y Hel temblará. Todo los Æsir y Einherjer (los hombres valientes caídos en batalla recogidos por las Valquirias para ser llevados al Valhalla y esperar la gran batalla del Ragnarok) se pondrán sus vestimentas de batalla. Este extenso ejército de 432,000 Einherjer -formados por 800 de ellos por cada una de las 540 puertas del Valhalla- marchará hacia Vigrid y Odín cabalgará al frente, usando un casco de oro y una faja brillante, sacudiendo a su lanza Gungnir.
La Batalla Final
Odín se dirigirá hacia Fenrir; y Thor a su derecha, no podrá ayudarle porque Jörmungandr, su viejo enemigo, inmediatamente lo atacará. Freyr se enfrentará al gigante de fuego Surt, pero se convertirá en el primero de todos los dioses en sucumbir pues él habrá prestado su propia espada a su criado Skirnir. Todavía quedará una larga batalla antes de que sucumba Freyr. Tyr logrará matar a Garm, pero será herido tan seriamente que sobrevivirá pero sólo hasta poco después de que el mundo sea destruido por el fuego. Heimdall se encontrará con Loki, y ninguno sobrevivirá el igualado encuentro. Thor matará a Jörmungandr con su martillo Mjölnir, pero solo podrá dar nueve pasos antes de caer muerto, envenenado por la saliva que Jörmungandr escupió sobre él. Odín peleará con su poderosa lanza Gungnir contra Fenrir pero finalmente será devorado por el lobo después de una larga batalla. Para vengar a su padre, Vidar llegará inmediatamente y pondrá un pie en la quijada del lobo. En este pie él calzará el zapato que ha estado forjando desde el principio de los tiempos, que consiste en tiras de cuero cortadas por los hombres sobre los dedos del pie y los talones de sus zapatos. Con una mano agarrará la quijada del lobo y quebrara su garganta, matándole por fin.
Entonces, Surt quemará al mundo entero con fuego. La muerte le llegará a todos los seres en la Tierra. El sol se apagará y las estrellas desaparecerán de los cielos. Surgirán vapores tóxicos y las llamas estallarán, abrasando el cielo con el fuego. Finalmente, la tierra se hundirá en el mar
Lo que resulta fantástico del relato del Ragnarok, es que es profetizado en la Voluspá (una especie de Shamán femenino) a Odín, así que según el mito, los dioses ya están advertidos sobre todos estos eventos, y saben y aceptan que no hay nada que puedan hacer para evitarlo. Ahora bien, también refleja que para los antiguos nórdicos, no había mejor muerte que morir en batalla con espada en mano
y es precisamente el final que otorgan a sus dioses.
Después del Ragnarok, al igual que la gran mayoría de las mitologías y creencias, hay un renacimiento de la el universo, la Tierra y la humanidad para vivir por siempre en la prosperidad.
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por Suricatte {"src_avatar":"https:\/\/cl2.buscafs.com\/www.levelup.com\/public\/uploads\/images\/32443\/32443_64x64.jpg","nickname":"Suricatte","user_name":"Surich JV","user_link":"\/usuario\/Suricatte","posts":10185,"theme":"background","cover":"https:\/\/cl2.buscafs.com\/www.levelup.com\/public\/uploads\/images\/360623\/360623_349x86.jpg?9812","status":true}
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