LEGO es una de las marcas más exitosa de las últimas generaciones de consolas; el correcto tratamiento que la franquicia da a las propiedades intelectuales de terceros y su sentido del humor suelen traer mucha diversión a los videojugadores más jóvenes. Sin duda, una de las mancuernas más exitosas es la que hace con Batman, que en esta ocasión llega con su tercera entrega, Beyond Gotham.

En este título, Brainiac engaña a las Linternas de muchas partes del universo, incluido Linterna Verde, quien pertenece a la Tierra y ha caído bajo el control mental del villano. Mientras tanto, Lex Luthor y sus secuaces se apoderaron del Salón de la justicia y de la Atalaya, la estación espacial donde se reúnen los superhéroes, y sólo Batman y los súper amigos pueden detener esta malvada conspiración que amenaza con destruir nuestro planeta. Básicamente, esa es la trama. No es lo mejor que hemos visto de DC, pero tiene giros interesantes y guarda cierta lógica; dicho de otro modo, es enormemente mejor que cualquier capítulo de la serie animada de los 80, en la que se inspiraron muchos elementos del juego.

Debido a que se trata de un título de LEGO, la atmósfera se sitúa en un universo de bloques de plástico, en el que en ocasiones es necesario construir cosas y en otras, destruirlas. Como en entregas anteriores, cada traje cuenta con funciones únicas que básicamente sirven para acceder a áreas restringidas del escenario, ya sea por presencia de enemigos o de obstáculos. La variedad de trajes es enorme, aunque algunos parecen poco inspirados, como el luminoso de Robin, que básicamente posee las habilidades de una bombilla de luz.

Un aspecto colosal de Beyond Gotham es la cantidad de personajes jugables: 150, entre los que vemos prácticamente a todo el universo DC, distintas versiones de Batman, Superman y algunos villanos provenientes de todo tipo de formas de entretenimiento como películas, cómics y series de TV; y si esto no bastara, también hay celebridades como Adam West y Kevin Smith. Existen varias maneras de obtenerlos; algunos forman parte de la historia principal, otros se desbloquean recolectando coleccionables o con minijuegos y unos más son DLC con precio muy razonable. Hay personajes con trajes especiales, pero tienen las mismas habilidades que Batman y Robin. También existen protagonistas con habilidades únicas, pero que carecen de traje, como Flash, Killer Croc o Plastic Man.

Un aspecto del título que difiere un poco con su antecesor es la exploración. En entregas anteriores teníamos una especie de mundo abierto que era la ciudad de Gotham, ahora las locaciones son más pequeñas, pero más variadas, así que podemos ir a lugares como la Baticueva, el Salón de la justicia, la Fortaleza de la soledad y más. La manera de visitarlos es durante las misiones de la historia principal, pero puedes regresar a ellos para desbloquear personajes o recolectar coleccionables.

Si bien existe una buena variedad de escenarios, las mecánicas normalmente se limitan a enfrentar a una pequeña oleada de enemigos, resolver un acertijo simple, armar un aparato y vencer al jefe, pero de vez en cuando encontramos algo distinto como un nivel de batallas espaciales inspirado en Resogun. También hay un buen número de trajes, el problema es que su uso es muy pobre porque básicamente sólo sirven para acceder a otras zonas del escenario y no siempre obedecen a la lógica, por lo que la experiencia se reduce a estar parado afuera de tu casa intentando abrir con 2 llaveros diferentes, cada uno con 12 llaves. Algo parecido pasa con los personajes, pues muchos de ellos poseen el mismo set de habilidades, así que podríamos decir que sólo se trata de skins diferentes. Sin embargo, lo peor fueron los bugs que me impidieron avanzar de nivel e incluso me obligaron a retroceder.

El aspecto visual de esta entrega en consolas de nueva generación no es especial; de hecho, al tratarse de juguetes creo que pudieron haber hecho un trabajo de más calidad. El sonido es bueno y el uso de los temas de los personajes puede resultar divertido; el doblaje es en español latinoamericano y es bueno aunque hay pocos diálogos, así que pasa mucho tiempo antes de que te topes con el humor característico de los juegos de LEGO.

LEGO Batman 3: Beyond Gotham es un título ambicioso que, en su búsqueda por incorporar elementos, pierde sustancia. La historia está bien lograda y la amplia variedad de personajes supone una extensa gama de posibilidades, el problema es que sus mecánicas pobres y un diseño de niveles repetitivo diluyen todo lo que podría hacer excepcional a este juego.