Desde el momento que comienzas a jugar este nuevo Saints Row notas que es muy parecido a las entregas 3 y 4. La pregunta es ¿eso es malo? Nuestra respuesta es sí, lo es. Gat Out of Hell es el primer título de la saga para las consolas de actual generación, por lo que esperábamos ver mejoras tanto en gráficos como en gameplay. Lamentablemente, el título se siente más como una expansión que como un DLC con suficientes piernas como para venderse sin el juego base. Pero no todo es malo, Gat Out of Hell conserva todo lo que hace genial a Saints Row: acción, humor y armas que parecen sacadas de la imaginativa mente de un niño de primaria.

Extrañarás crear a tu personaje

Todo inicia cuando Satanás secuestra al presidente con el propósito de casarlo con Jezabel, su hija y los protagonistas deben viajar al corazón del infierno para traer a su líder de vuelta. Parece una historia normal en la franquicia, donde no se requiere mucho contexto para que lo absurdo cuadre a la perfección.

Lo primero que debes de saber es que en esta ocasión no podrás personalizar ni crear a tu personaje, sólo controlar a 2 predeterminados: Gat y Kinzie, algo lógico si piensas que el título lleva sus nombres. No existen diferencias entre controlar a cualquiera de los 2 y puedes cambiarlos en el momento que decidas. Tal vez esto desanime a muchos fanáticos de la franquicia, ya que la personalización era una de sus características y atractivos más importantes, y además eso provocó que las tiendas de ropa y los trajes desbloqueables fueran eliminados. Por fortuna, controlar a Gat o Kinzie, es divertido: tienen buenas líneas de diálogo y por fin tenemos oportunidad de usar a estos miembros de los Saints. Es fácil acostumbrarse a usarlos, pero extrañarás crear a tu personaje.

La historia no requiere mucha explicación y se siente muy simple respecto a las de entregas anteriores. Hay muy pocas escenas cinemáticas y la mayor parte de la trama se narra con dibujos semejantes a los de un libro de cuentos, que aunque no lucen mal, se sienten apresurados. Recorres el infierno, conoces personajes históricos de la vida real y ves caras familiares de la franquicia. Lamentablemente, ninguno se siente bien usado y sus papeles son genéricos; interactúan muy poco contigo (sólo te dan misiones) así que tendrás la sensación de que la historia cae cada vez más conforme avanzas en el juego.

Es claro que el punto fuerte de títulos de mundo abierto es su atmósfera, y Saints Row levanta la mano en cuanto a irreverencia. El juego sigue la línea del género, pero crea una desviación única que lo ha llevado a estar entre los mejores. En Gat Out of Hell te sitúas en una parte del infierno que semeja mucho a lo que era Steelport, la ciudad de las entregas anteriores, sólo que más reducida, es decir, el mapa es mucho más pequeño, por lo que podrás recorrerlo rápidamente de esquina a esquina. Contarás con las clásicas misiones de historia y secundarias, por ejemplo, carreras contra el tiempo y destrucción masiva por puntos. Llevar a cabo fraudes es lo más divertido, pues el objetivo es causar el mayor daño posible usando los automóviles para lanzarte por el aire y acumular años de penitencia contra las tristes almas que llegan al infierno.

Saints Row levanta la mano en cuanto a irreverencia

Las misiones principales son escasas y la mayoría se inclina por llevarte a recorrer la ciudad completando las tareas secundarias, así que repetirás las mismas una y otra vez, lo que se torna tedioso, además de que nos hubiera gustado tener más misiones temáticas. Ahora bien, necesitarás un par de cosas para avanzar: armas increíbles y poderes sobrenaturales, que serán las herramientas principales en tu recorrido por el infierno. Regresan la súper velocidad y la fuerza, pero ahora podrás utilizar la habilidad de volar: olvídate de correr o usar vehículos, una vez que te familiarices con los controles de vuelo, recorrerás la ciudad por el aire. Todas las habilidades pueden ser mejoradas al subir de nivel, así que conforme avances podrás aumentar tu velocidad, duración de vuelo o resistencia al daño.

El juego llega con armas nuevas, como el lanzador de ranas explosivas o la escopeta/ballesta, así como las clásicas pistolas y metralletas, pero lo mejor viene cuando comienzas a desbloquear los 7 pecados. Estas armas se relacionan con cada uno de los pecados, por ejemplo, la pereza es un sillón con metralletas y la lujuria es una escopeta que enamora a tus enemigos y luego les vuela la cabeza. Estas son las más poderosas, por lo que tendrás que completar desafíos para conseguirlas todas, el problema es que una vez que las obtengas serás tan poderoso, que ni si quiera el jefe final será un reto para ti.

Terminar la historia principal te tomara un par de horas, así que lo más probable es que sientas que el infierno aún tiene mucho para ti y es aquí donde los coleccionables entran a hacer su trabajo. Pasarás horas recolectando cientos de orbes, que sirven como moneda para mejorar tus poderes; además, habrá puntos de interés donde tu personaje interactúe, lo que te da un par de líneas de diálogo y te otorga experiencia (un divertido agregado para conocer todos los puntos del mapa).

Cuando pruebes esta entrega seguro sentirás que estás jugando un gran DLC. Gat Out of Hell hubiera funcionado a la perfección como una expansión hace un par de años, pero ahora, al venderlo como un juego separado, sentimos que Volition se está quedando sin ideas. Esperemos que pronto retomen el rumbo de la franquicia y nos otorguen algo totalmente nuevo. Mientras tanto, sólo nos queda disfrutar este excéntrico, pero muy corto viaje al infierno