{"src_avatar":"https:\/\/cl2.buscafs.com\/www.levelup.com\/public\/uploads\/images\/31066\/31066_64x64.jpg","nickname":"AngieloRko","user_name":"Angielo Martinez","user_link":"\/usuario\/AngieloRko","posts":899,"theme":"default","cover":false,"status":true} por
{"src_avatar":"https:\/\/cl2.buscafs.com\/www.levelup.com\/public\/uploads\/images\/31066\/31066_64x64.jpg","nickname":"AngieloRko","user_name":"Angielo Martinez","user_link":"\/usuario\/AngieloRko","posts":899,"theme":"default","cover":false,"status":true}
Admítelo, los juegos de Batman creados por Rocksteady se han convertido en un estándar para tratar una licencia de cualquier superhéroe. Hace 6 años, Batman: Arkham Asylum se convirtió en un parteaguas porque no habíamos visto un buen juego de superhéroes desde las épocas de Spider-Man en PS1. Ahora, después de un par de retrasos, llega la esperada conclusión del Caballero de la Noche, para la que Rocksteady nos prometió algo aún más grande, inmersivo y, sobre todo, épico. La desarrolladora cumplió y con creces —al menos en la versión de PlayStation 4, que es la que utilizamos para elaborar esta reseña—.
Rocksteady nos prometió algo aún más grande
Batman: Arkham Knight comienza donde nos dejó Arkham City. Joker ha muerto y la ciudad parece recuperarse de los horribles sucesos, pero Gotham no puede permanecer tranquila y Scarecrow busca venganza contra Batman después de la humillación que sufrió en Asylum. Esta vez la misión de Scarecrow es llenar de miedo la mente de Batman y además reunió a la crema y nata de villanos de Gotham para consumir lo que resta de la ciudad. Scarecrow amenaza con liberar un gas tóxico que convierte instantáneamente en maníaco a quien entre en contacto con él, el pánico se apodera de Gotham, por lo que se pone en marcha un plan de evacuación y la ciudad rápidamente se encuentra desolada, pero no vacía: ahora los criminales tienen un campo de juego para disfrutar a sus anchas mientras la mejor fuerza policial trata de conservar el poco orden en las calles. El comisionado Gordon pone a tu disposición las instalaciones de Gotham Police Department, donde poco a poco llevarás a la escoria que aterroriza el lugar, para lo cual cuentas con tus fieles compañeros, Oracle, Robin y Alfred, quienes participan en la historia de una manera mucho más protagónica y revelan un poco más de su vida.
Uno de los puntos más fuertes de Batman:Arkham Knight es su historia. La trama se desarrolla a la perfección; sólo muestra pequeños indicios de lo que sucederá, constantemente te mantiene a la expectativa de lo que se avecina y no cae en los tediosos clichés ni fuerza demasiado los diálogos, simplemente te lleva por una montaña rusa que te deja con la boca abierta. Presentar a Scarecrow como el villano principal le viene muy bien al juego, ya que aporta un sentimiento mucho más turbio respecto a lo que fue Joker en títulos anteriores. Si consideramos a Scarecrow la mente maestra detrás del plan para destruir Gotham, entonces el Arkham Knight es el músculo que guía toda la acción. Este misterioso ser armado está a cargo de toda la milicia que ahora invade la ciudad, y aunque parece mucho más poderoso que el resto de los villanos, responde sólo a Scarecrow. No daré más detalles porque quiero que disfrutes la historia. Y aquí es importante señalar que, si postean spoilers en los comentarios, los borraremos.
Lo primero que notarás es la asombrosa mejora visual, cada detalle luce sensacional. Los escenarios, los modelos de personajes, lo maravilloso del Batmobile… todo es espectacular, pero quiero enfatizar que los desarrolladores buscaron impregnar un estilo propio en la ciudad: es muy sombría, pero hay colores destacados en anuncios y luces, lo cual le da vida sin eliminar la sensación de que está sitiada, y eso te conecta con la experiencia de inmediato. No está de más mencionar que el aspecto de algunos personajes fue retocado para que luzcan más reales, lo que es muy evidente en Robin, Oracle o Catwoman, quienes ahora tienen facciones mucho más marcadas y con rasgos de edad. Este tipo de detalle se agradece, ya que los desarrolladores no sólo reciclaron modelos, sino que trabajaron para otorgarnos una mejor experiencia visual.
Los desarrolladores buscaron impregnar un estilo propio en la ciudad: es muy sombría
Un punto muy importante es el tamaño del mapa. La ciudad es 5 veces más grande que en Arkham City, por lo que era imperativo incluir un nuevo modo de transporte: el Batmobile. Las calles son mucho más amplias y están llenas de cosas para destruir, y cuando digo “llenas” me refiero a que podrás pasar sobre autos, árboles, construcciones e incluso estatuas, todas con una física sorprendente, así que la destrucción causada por tu vehículo de alto poder se verá diferente al actuar sobre mármol que sobre otro material. Si bien manejar a toda velocidad es encantador, disfruto mucho volar usando la capa y aquí añadieron instalaciones y edificios más altos, por lo que tendrás más puntos para impulsarte, y hacia el final del juego, cuando mejores tus habilidades, alcanzarás mayores distancias y tu tiempo de vuelo se incrementará. ¿Dije que puedes pasear por la ciudad sin preocuparte por pantallas de carga? Nada más vi un tiempo de carga que duró 1 segundo; sólo tendrás que esperar cuando mueras o reinicies un desafío, así que ahora creemos que Rocksteady realmente considera los tiempos de carga mundos abiertos una aberración.
La ciudad, aunque semivacía, no sufre sequía respecto a cosas que hacer; encontrarás cientos de objetivos. Sea liberar zonas tomadas por la milicia del Arkham Knight, seguir la pista de supuestos avistamientos de un murciélago gigante o resolver los desafiantes acertijos de Riddle, cada misión secundaria tiene trama, por lo que no sentirás que ejecutas actividades sin sentido. Las tareas ahora son parte de una línea que te lleva a conocer a un villano, avanzar en las misiones y encontrar al responsable de cada acontecimiento, con quienes finalmente te enfrentas de manera diferente porque cada uno tiene su dinámica de combate específica.
Es cierto que hay muchas cosas por hacer, pero la interfaz es sencilla y podrás registrar el porcentaje completado en cada misión secundaria, así como seleccionar la misiones que quieres mantener como principales con sólo apretar un botón. La forma en que se presentan los puntos de interés en el mapa encaja a la perfección. Al marcar el siguiente objetivo, el juego nunca pondrá la locación exacta, sino que te dejará en un radio cercano al lugar y tendrás que usar tus mejoras auditivas y sistema de rastreo. Por ejemplo, cuando busques a un enemigo que está sobrevolando la ciudad, en tu radio escucharás cierto ruido característico al entrar en la zona, pero tendrás que localizarlo usando tu modo detective y una vez que lo consigas estarás listo para enfrentarlo.
Como mencioné, existe todo tipo de misiones secundarias y aunque algunas son simples como limpiar una zona de enemigos o rescatar civiles, otras tienen dinámicas más complejas, como eliminar una horda de tanques mientras desactivas una bomba ―lo que implica el uso del Batmobile― o investigar a fondo unos homicidios usando el modo detective sobre los cuerpos que ves en el mapa. Las misiones no siempre estarán disponibles para acceder a ellas, muchas veces necesitarás avanzar en el juego para desbloquearlas, pero ―sobre todo― estar al pendiente de tu alrededor y radio porque hay pistas sobre la localización de objetivos escondidas a lo largo de Gotham. Recuerda que tu deber como protector de la ciudad es estar al pendiente de cada detalle, y por eso es esencial que completes todas las misiones si quieres conocer la historia completa. Esto requerirá tu paciencia, ya que, aunque algunas misiones se sienten trabajadas y desarrolladas, otras son más bien simplonas.
Es esencial que completes todas las misiones si quieres conocer la historia
El combate es un elemento característico de la franquicia y en esta entrega se siente mejorado en varios aspectos, particularmente en los movimientos. Ahora todo luce más natural: al ejecutar una cadena de golpes notarás nuevas animaciones, así como más soltura en los ataques; esquivar o contraatacar se vuelve un deleite y los nuevos takedown ambientales te causarán verdadero dolor porque están muy bien representados. Si bien para muchos el combate o freeflow es sencillo y lo tachan de botoneo sin sentido, en Arkham Knight es mucho más que eso. Durante los enfrentamientos cada botón corresponde a una acción (golpe, aturdir, esquivar o usar gadget) y la combinación forma combos que puedes encadenar si no recibes daño.
En esta entrega el número de enemigos durante las peleas es mayor y hay nuevos tipos de agresores que serán un dolor de cabeza, así que deberás planear tu estrategia y estar al pendiente del momento exacto para presionar el botón de Counter si no quieres sufrir grandes cantidades de daño. Algunos villanos serán más resistentes, por lo que tendrás que armar una cadena de golpes y después atacar, ya que mientras más alto sea tu combo más daño ocasionarás. Decidirás cómo será tu sistema de combos, ya sea empezar por jalar al oponente con el Batclaw o paralizarlo con un Batarang; pero una vez que encuentres tu ritmo serás imparable y eliminarás enemigos en un solo combo.
Un agregado de esta entrega es el combate dual, que sólo podrás ejecutar en zonas y momentos específicos de la historia, pero resulta tan divertido que no querrás que termine. Este tipo de encuentros te permite pelear codo a codo con Catwoman, Nightwing y Robin, y con sólo presionar un botón podrás intercambiarlos en cualquier momento, sin pantallas de carga ni caída de frame rate. El botón también activa los takedowns duales, que son una increíble coreografía de golpes que concluyen con un poderoso ataque de ambos personajes. Igual que los takedown normales, podrás ejecutarlos después de cargar una pequeña barra que se llena al conectar golpes, así que sólo presiona el botón y disfruta.
Otra adición viene en el modo sigilo. Podrás ejecutar takedowns en serie: una vez que te acerques a un grupo de enemigos sin ser notado, aparecerá la opción de presionar un botón para comenzar la cadena; después de eliminar al primero tendrás un par de segundos para seleccionar a tu siguiente víctima y así consecutivamente hasta 5 veces. Para recargar este movimiento tendrás que realizar takedowns silenciosos, pero cuando lo tienes disponible es perfecto para comenzar una batalla a gran escala y el resultado es completamente satisfactorio, ya que, si conectas a la perfección tus movimientos, eliminas a varios enemigos en un par de segundos.
Como es tradición, Batman tendrá a su disposición un gran arsenal de armas y gadgets desde el inicio. Cada uno comienza muy simple, pero conforme avances podrás mejorarlos porque al completar cada misión recibirás un token de Waynetech para usarlo en combate, tu traje, el Batmobile o gadgets. Un ejemplo es el disruptor que sirve para silenciar armas de tus enemigos, pero al mejorarlo será capaz de eliminar tanques con un disparo. También recibes experiencia durante el combate y al resolver acertijos, lo cual llena tu barra de y otorga otro token; las mejoras más avanzadas requieren más tokens, pero mientras avances en la historia no tendrás problemas para conseguirlos.
La incógnita más grande que tenía era cómo añadirían un vehículo sin que se sintiera como un accesorio más y Rocksteady se las ingenió para crear un Batmobile que cumple distintas funciones. Al inicio tardé en acostumbrarme a los controles del Batmobile y a la forma en que se mueve y se maneja, sobre todo por el extraño esquema de controles que le asignaron. El Batmobile tiene 2 modos principales. En el normal te desplazas por la ciudad y tienes un sistema de armas reducido; es útil para la velocidad. El otro modo es de tanque, donde al presionar uno de los gatillos tienes una rápida transformación del auto en una bestia llena de armas (metralleta, lanzacohetes, EMP y hackeo); esto provocará que te desplaces de una manera más lenta, pero más efectiva para esquivar disparos. Estas armas son desbloqueables, así que es probable que al inicio te desesperes un poco, pero dale tiempo, cuando seas uno con el Batmobile tendrás en tu poder una máquina de destrucción. El único problema viene cuando la cámara obstaculiza tu visión, ya que cuando te mueves constantemente en el modo tanque, tendrás que girar la cámara constantemente para localizar los enemigos; no es algo que rompa la acción del juego, pero sí llega a ser molesto.
Tu vehículo no sólo sirve para desplazarte o durante batallas, su implementación en distintas tareas cae como anillo al dedo en la experiencia, sobre todo en los nuevos puzzles que Riddle diseñó exclusivamente para ti. En carreras de obstáculos, para colgarte con cables o simplemente como contrapeso, el Batmobile da lugar a nuevos desafíos que refrescan la franquicia. El Batmobile también es un gadget, así que al seleccionarlo dentro de tu carrusel de armas podrás controlarlo a distancia y llamarlo, si te encuentras atrapado; lo que es de gran utilidad en momentos en los que necesitas mucha más fuerza para destrozar muros o jalar objetos pesados. Habrá secuencias de persecución donde usarás el peso del Batmobile para destrozar enemigos, y con la combinación del stick y un botón lograrás un takedown. Esto trae un grato recuerdo de franquicias como Burnout, donde todo giraba en torno a una mecánica similar; en Arkham Knight no son frenéticas ni lucen tan bien, pero la característica está implementada a la perfección.
Rocksteady se despide de la franquicia de Batman con una obra maestra, su mejor juego hasta la fecha. Cada elemento se siente como una carta de amor tanto a Batman como a los fanáticos, y la cantidad de fan service es ridícula; los desarrolladores supieron tocar nuestras fibras más sensibles y explotarlas al máximo. Batman: Arkham Knight es la perfecta conclusión de una excelente saga y se va como llegó: sorprendiéndonos y dejándonos con una gran satisfacción. Sólo nos queda decir ‘gracias, Rocksteady por dejarnos ser Batman una última vez’.
Comentarios
Mejores
Nuevos