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Actualmente, Uncharted es una de las series más aclamadas de PlayStation, lugar que se ha ganado luego de 4 juegos principales que conquistaron por completo a los fans por su manera de abordar el género aventura. Su primer título llegó al PS3 hace casi una década y cuando jugamos aquel Dude Raider jamás nos imaginamos lo lejos que llegaría Naughty Dog con esta franquicia, mucho menos pensamos que se convertiría en parte importante de su historia y que sería el antecedente de otras propuestas como el magnífico The Last of Us.
Cuando jugamos Uncharted 4 el año pasado, nos dimos cuenta de que una década no pasó en vano para la serie. Los gráficos, las mecánicas, la narrativa y la minuciosa atención a los detalles nos hicieron pensar que era difícil que alguien igualara esa manera de presentar la aventura dentro de un videojuego.
Desde que Uncharted 4 fue lanzado supimos que, por primera vez, tendría una expansión similar a lo que en su momento fue Left Behind para The Last of Us. Con el paso de los meses escuchamos poco de ese DLC hasta que en PlayStation Experience del año pasado se reveló que sería un juego por separado con Chloe Frazer como protagonista.
Aunque Sony ha hecho experimentos similares con otros de sus juegos, es claro que las ambiciones con The Lost Legacy van más allá de ser una simple expansión. Consideremos como ejemplo inFamous: First Light, que se vendió como juego separado, con una nueva protagonista con poderes e historia, pero los escenarios de inFamous: Second Son no nos permitieron considerarlo algo tan ajeno a su origen.
Uncharted: The Lost Legacy es un caso distinto. No fue el equipo de Neil Druckmann el que lo desarrolló; en su lugar, Kurt Morgeanu y Shaun Escayg lideraron un proyecto que nos lleva a una locación nunca explorada en la serie, donde también conocemos a nuevos personajes y una historia inédita que nos permite conocer, sobre todo, a Chloe Frazer. El juego no está completamente deslindado del resto de la serie, de hecho, sucede un año después de los eventos de Uncharted 4 e involucra a personajes que conocíamos, como la mercenaria Nadine Ross; no obstante, busca consolidarse como una aventura separada.
Luego de disfrutar su campaña —que me tomó aproximadamente 10 horas— ratifico que siempre es mejor tener expectativas mesuradas al probar un juego nuevo. Afortunadamente, Sony no cometió el error de emocionar de más a la gente con lo que propone The Lost Legacy, juego que muchos seguirán considerando la expansión de Uncharted 4. Al final del día, todos podrían llevarse una grata sorpresa al comprobar que este título supera por mucho la línea de una simple expansión para quedarse con su lugar especial dentro de la serie.
Retomando todo lo que hizo de Uncharted 4 un gran videojuego
En Uncharted: The Lost Legacy regresa Chloe Frazer, quien se ganó a los fans luego de su participación en Uncharted 2 y Uncharted 3. Esta cazarrecompensas se une a Nadine Ross, quien fue villana en Uncharted 4, para buscar el colmillo de Ganesha en los exóticos parajes de las Ghats occidentales en la India. Este viaje, además de permitirnos explorar el pasado de Chloe y su relación con Nadine, evoca los orígenes de la serie donde exploramos ruinas perdidas, jalamos palancas sin saber lo que sucederá y resolvemos acertijos dentro de trampas mortales.
Entre cada entrega de la serie fueron notorios los cambios técnicos y la evolución de la jugabilidad, algo que no ocurre entre Uncharted 4 y Uncharted: The Lost Legacy, que se mantienen muy similares entre sí, algo comprensible si consideramos que los orígenes de Chloe Frazer están en el juego más reciente de la serie.
Uncharted: The Lost Legacy conserva prácticamente todo lo que vimos en Uncharted 4, es decir, la maduración de mecánicas que evolucionaron muy bien a lo largo de la generación pasada y se condensaron en una propuesta más orgánica.
Novedades de Uncharted 4 como el uso del lazo para balancearte y escalar, exploración con vehículos, combate melee muy cinemático pero funcional, la opción de ocultarte en pastos altos o debajo del agua en los tiroteos, entre otras mecánicas, se conservan prácticamente intactos.
The Lost Legacy sigue siendo muy respetuoso con el ritmo de la serie y teniendo largas secuencias de escalada, tiroteos con la ventaja de marcar enemigos, la importancia del sigilo para evitar riesgos innecesarios y finalmente, balaceras en las que cada arma se siente única; en resumen, ese sistema de combate creativo en el que todo lo que te rodea puede ayudarte a salir de un aprieto. Sin embargo, Naughty Dog no se olvidó de sus clásicas persecuciones llenas de acción y adrenalina ni de la inclusión de cinemáticos muy bien cuidados para contar una buena historia a su manera.
¿Qué hay de nuevo en Uncharted: The Lost Legacy?
Afortunadamente, The Lost Legacy también incluye algunas novedades que pretenden mantener fresco el juego. Tenemos el mapa más grande que se ha hecho para un título de la serie y que nos da una sensación de libertad nunca experimentada en la franquicia. Recordemos el capítulo de Madagascar en Uncharted 4 para darnos una idea de cómo funciona dicha sección, aunque en esta ocasión la ambición es mayor por los distintos puntos de interés.
No hay que confundirse, la inclusión de dicha zona nunca tuvo la intención de entregarnos un Uncharted de mundo abierto, aunque sí experimenta de forma acertada con un capítulo que logra darnos el sentimiento de exploración libre, mismo que pudiera faltar a la serie por su estructura lineal. Este capítulo ofrece algo que podríamos considerar una misión secundaria: conseguir medallones Hoysala a cambio de una reliquia poderosa.
A pesar de lo anterior y del cambio de ritmo, el diseño del juego nunca pierde de vista que el mapa es sólo un HUB para interactuar con una serie de secciones absolutamente controladas y lineales con un excelente diseño de niveles.
Algo que también noté a lo largo de la campaña es un ajuste ligero a la manera en que funciona el melee, no tanto la mecánica como tal, sino más bien la animación. El estilo de pelea de Drake era mucho más informal, mientras que el de Chloe se siente mucho más enfocado en las artes marciales y el de Nadine, completamente digno de una mercenaria.
Hablando de Nadine, me agradó que su presencia es siempre notoria en el campo de batalla, tanto de manera positiva como negativa. Por un lado, es mucho más útil que cualquier otro side-kick que hayamos tenido en la serie y sus asistencias no dejan de parecerse a lo que nos dejó Uncharted 4, pero un poco más refinado. Del lado negativo tenemos que, aunque siempre busca no entrometerse en tu camino, hay momentos en que te estorba un poco en los tiroteos.
Me agradó mucho la interacción entre Nadine y Chloe; además de sus múltiples pláticas casuales; me pareció positiva la inclusión de montones de diálogos opcionales que, por lo general, exploran curiosidades culturales y naturales de los entornos en los que se encuentran. Con este tipo de detalles, Naughty Dog entrega un gran desarrollo de personajes que se complementa con cinemáticos pertinentes y momentos de juego pasivos pero ricos en carga narrativa y sentimental.
Entre otras novedades, existe un par de mecánicas nuevas como que Chloe use una ganzúa para abrir puertas y cajas mediante un pequeño minijuego que hace uso de la vibración del control, algo que será útil tanto en secuencias de exploración como en la búsqueda de las decenas de coleccionables. Otra mecánica nueva tiene que ver con el teléfono de Chloe, pues tendrás que encontrar oportunidades de foto dispersas por los escenarios para armar un diario visual que funciona como el de Nathan Drake.
La magia de la dirección artística, el sonido y la consistencia narrativa
Es bueno darnos cuenta de que el nivel de calidad visual y auditiva no se descuidó en The Lost Legacy; la exquisita dirección de arte no deja de sorprendernos y nos obliga a detenernos para mirar el paisaje mientras escuchamos un soundtrack perfecto para la ocasión.
Con Uncharted, Naughty Dog nos ha demostrado que, además de la montaña rusa de emociones, sus creaciones otorgan momentos contemplativos y memorables en los que el escenario reacciona como si estuviera vivo, algo que logran con atención a detalles como iluminación, pláticas casuales entre los personajes, elementos que reaccionan al paso del personaje y áreas diseñadas únicamente para que te detengas a admirar el excelente trabajo de artistas en perfecta sincronía. ¿Recuerdas lo solemne que fue aquel momento en que Joel y Ellie miraron a las jirafas en The Las of Us? Quizá no tenga la misma carga emocional, pero Uncharted: The Lost Legacy tiene ese tipo de detalles únicos y especiales de Naughty Dog que aportan mucho al sentimiento general del juego.
Por cierto, puedes capturar todo lo épico de esos momentos inolvidables gracias a un modo fotografía que cada vez es más completo. En este caso, puedes esperar las mismas herramientas de Uncharted 4, además de otras nuevas como cambiar la posición del Sol y las expresiones faciales de los personajes.
Como parte de los complementos narrativos de la experiencia, sigo admirando el talento de Naughty Dog en la escritura de sus guiones. Me encantó el humor, recurso del que nunca abusa y que integra bromas entre los personajes que incluso combinan tanto los diálogos como el gameplay; no quiero hacer un spoiler, así que sólo diré que cuando jueguen verán a qué me refiero.
En cuanto a la historia, The Lost Legacy tiene la intención de presentar un relato inocente que captura los ingredientes básicos de cualquier producto que busca llevar a sus consumidores una épica aventura de búsqueda del tesoro. Es una historia menos compleja que la de Uncharted 4, y si bien explora elementos sobre el pasado y las motivaciones que tienen tanto Chloe como Nadine, el argumento principal se sustenta más bien en la mitología hindú y los misterios del imperio Hoysala.
Finalmente, no podemos dejar de reconocer el gran trabajo que hay en las actuaciones de voz. Claudia Black regresa como Chloe Frazer y Laura Bailey como Nadine, acertada participación que enriquece el producto. Si quieres disfrutar el juego en español, tienes la opción de colocar subtítulos o elegir doblaje en español latinoamericano bien ejecutado.
Lo que pudo haber sido mejor…
Aunque Naughty Dog domina por completo su género, no todo es perfecto en The Lost Legacy porque arrastra algunos pequeños problemas de la entrega del año pasado. Tenemos, por un lado, el asunto de que tu compañera, a pesar de ser más útil e inteligente, estorba en algunas secciones. Por otro lado, las clásicas secciones de escalar gozan de buen diseño, pero persiste la mecánica automatizada de presionar un solo botón una y otra vez para ejecutar la acción.
Algo que también llegó a ser molesto es que, a pesar de tener una pantalla libre de asistencias, hubo algunas muy incisivas. Por ejemplo, mientras seguía explorando la zona abierta de Western Ghats, un indicador asumía que me había perdido y me sugería el camino a seguir de forma persistente; siempre está la opción de apagarlas, eso es claro, pero ¿acaso no podían ser un poco más pertinentes y oportunas al tenerlas encendidas?
Entre otros problemas, nos sigue pareciendo un poco ridículo lo fácil que es ocultarse bajo el agua una vez que todos los rivales han sido alertados y aunque no todos los mapas en los que suceden combates incluyen esta posibilidad, un par de secciones pueden burlarse fácilmente con dicho recurso hasta en las dificultades más altas.
¿Qué recibo al comprar Uncharted: The Lost Legacy?
Es bueno saber esto porque eres quien decide con su cartera si la propuesta es suficientemente llamativa para adquirir el juego, con todo y su costo reducido de $40 USD respecto a los $60 USD que suele costar cualquier nuevo lanzamiento.
Tenemos una campaña de entre 7 y 10 horas con nuevos personajes, lugares nunca vistos y el mismo nivel de calidad narrativa y cinemática que caracteriza a Naughty Dog. Se agradece, como siempre, un muy buen diseño de niveles a lo largo de toda la aventura.
Si eres de los jugadores completistas, te alegrará saber que hay decenas de tesoros, varias oportunidades de foto para Chloe y montones de conversaciones adicionales que te llevarán a explorar hasta el último rincón de cada capítulo. Otro elemento que podemos aplaudir a The Lost Legacy es la inclusión de una muy buena cantidad de acertijos que, igual que en Uncharted 4, no se trata de los rompecabezas más complejos, pero tienen la dificultad adecuada para que esta aventura sea un buen videojuego y te otorgue el sentimiento de realmente estar desentrañando misterios ancestrales.
Finalmente, una vez que has conquistado la campaña en sus diferentes niveles de dificultad, puedes disfrutar todos los contenidos multijugador de Uncharted 4, incluyendo sus modos competitivos y cooperativos, un gesto que se agradece para aumentar el valor de compra.
Conviene recalcar que los cambios sustanciales en mecánicas de juego respecto a Uncharted 4 son mínimos y es algo que debes considerar si dicho juego no fue de tu agrado.
En resumen, “más de lo mismo” en el mejor sentido de la palabra
Teniendo lo anterior, podemos decir que Uncharted The Lost Legacy es “más de lo mismo” en el mejor sentido de la palabra, todo lo bueno que logró su predecesor está de regreso en una aventura de entre 8 y 10 horas que, por su magnitud y sus alcances, logra sentirse realmente como una experiencia con una nueva aventura épica que puede vivir por sí misma. El experimento de incluir un enorme mapa con más libertad le sienta bien y, definitivamente, le da un toque de frescura que se agradece.
En este caso aplica muy bien la pregunta ¿para qué arreglar algo que no está roto? Pueden estar tranquilos todos los fans de Uncharted, pues los momentos épicos que nos hacen saltar de emoción con la serie están presentes en esta nueva entrega que, además, hará recordar algunos de los mejores de la saga.
Como fan de la serie me encantó su ritmo, su desarrollo de personajes, su increíble dirección artística —que me hizo tomar más de 300 capturas de pantalla— y su relato sencillo pero funcional. Al rodar los créditos tenía una sonrisa de oreja a oreja y me sentía satisfecho con el juego pensando en que muchas de mis expectativas fueron superadas.
Si eres fan de Uncharted o de los juegos de aventura podemos decirte que Naughty Dog lo hizo de nuevo; con The Lost Legacy realmente cierran con broche de oro su paso por una franquicia que también merece un descanso y que, por el momento, se despide con otra aventura llena de emociones. Es, en definitiva, una más de esas aventuras que no puedes dejar de probar si tienes un PlayStation 4.
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