Originalmente lanzado como proyecto en Kickstarter, Neon City Riders logró llamar la atención de los jugadores, gracias en gran parte a la promesa de un juego de acción y aventura de temática cyberpunk con una interesante influencia de varios títulos, como The Legend of Zelda: Link's Awakening, Earthbound y Hyper Light Drifter. La iniciativa superó la meta y hoy, luego de casi 3 años de desarrollo, Neon City Riders es una realidad gracias a la desarrolladora veracruzana Mecha Studios y la distribuidora también mexicana Bromio.

A primera vista, los colores y diseño llamativo de los entornos parecen cumplir con las expectativas que generó el título durante su campaña y desarrollo, pero ¿logra el gameplay hacerle justicia a dichos apartados y acoplarse al producto final para ofrecer una experiencia igual de llamativa? Tras un viaje a la metrópoli en decadencia del juego, puedo decir que el indie logra dar en el blanco y atrapa algunos elementos de los juegos de antaño en una experiencia que destaca por su dificultad.

Neon City Riders — disponible en:

• PlayStation 4
• Xbox One
• Nintendo Switch
• PC (Steam)

En busca de la unificación de Neon City

El juego se desarrolla en Neon City, una metrópoli cyberpunk que a mediados del siglo XXI era una potencia robótica a nivel mundial, pero que una serie de eventos la llevó a la decadencia y a la corrupción de sus estratos sociales, antes ampliamente dominados por el humano. Como una de las tantas consecuencias, hubo contaminación que hizo que algunos habitantes de Neon City ganaran superpoderes y se dividieran principalmente en 4 pandillas, que se disputan las 4 áreas de la ciudad y que han sido la causa del aumento en los niveles de bandalismo.

La aventura comienza en el Distrito Neón, un lugar que pueden visitar todos los miembros de las 4 pandillas sin entrar en conflicto, ya que es considerado el punto de encuentro para intercambiar bienes y aprovechar servicios sin distinción. En este lugar tomas el control de Rick, un humano enmascarado que no está contento con la violencia que generó el fraccionamiento de la sociedad y que intenta ser el unificador de Neon City con ayuda de Evergrey, un anciano que lo ha entrenado en un mundo virtual para acabar con las guerras de territorios.

La tarea no es para nada sencilla, puesto que cada pandilla tiene un líder poderoso. Pero Rick no va desarmado, para hacer frente a todos estos peligros cuenta con 4 poderes principalmente, que combina con sus ataques con un tubo de metal. No obstante, al estilo de algunos metroidvanias como Castlevania: Symphony of the Night o Metroid Prime, un virus ataca la máquina y deja sin sus habilidades a Rick, por lo que tendrá que ir en busca de ellas y prepararse en el mundo real.

Tú decides donde comenzar a explorar

Tan pronto reapareces en el Distrito Neón notas un entorno diferente a la simulación y la falta de poderes son evidentes. A pesar de ello, es posible elegir por qué camino abrirte paso en la aventura. Desde el inicio, tienes la libertad de explorar el norte, el sur, el este o el oeste, cada área gobernada por una pandilla. Como en todo buen metroidvania, habrá lugares en cada territorio a los que será imposible acceder si no se tienen ciertas habilidades, así que para explorar el mapa por completo será necesario recuperar los poderes y regresar varias veces, lo cual no será tan complicado, pues existen máquinas que al activarse se habilitan como puntos de viajes rápidos.

Al inicio quizá sientas que no sabes a donde ir, en especial porque el juego no suele darte pistas que dejen ver que estás siguiendo el camino correcto. A pesar de que para muchos esto puede parecer confuso o hasta frustrante, lo considero como algo positivo, ya que creo que abona a la exploración de los diferentes caminos y te hace pensar a qué área puedes dirigirte a continuación. El juego te indica esto de manera implícita, pues sólo es necesario recordar con cuales habilidades se puede sortear cada tipo de obstáculos; si no es posible acceder a alguna área, sencillamente es porque no tienes el poder o el artículo necesario.

El sistema de juego está inspirado en el de títulos clásicos de The Legend of Zelda, porque se avanza tras resolver cada sección o mazmorra. Así, Neon City se divide en 4 regiones y cada una se resuelve a 2 tiempos; es decir, para poder completar cada sección es necesario abrirse paso hasta un refugio de un subjefe, que resguarda 1 de los 4 artículos que otorgan habilidades a Rick, y posteriormente ir a derrotar al jefe. La diferencia en este título es que llegar hasta el líder de la pandilla no se logrará usando la habilidad recién adquirida, sino que será necesario completar una especie de misiones secundarias antes para desbloquear nuevas áreas.

Esto genera que el vencer a un subjefe te invite a explorar lugares de otras regiones para desbloquear nuevos encargos o misiones y encontrar los artículos necesarios para seguir la línea narrativa de cada personaje, que además aporta información sobre los eventos que desencadenaron la decadencia de Neon City Riders. Creo que esta combinación de exploración fue bien implementada, ya que de esta manera descubres otros lugares de forma natural cuando exploras las regiones para platicar con el NPC que tiene el objeto clave.

Mecha Studios logró presentar un mundo cyberpunk estético

Aunque el gameplay es lo que más brilla en Neon City Riders, hay secuencias con diálogo que ayudan a contar el fatídico pasado de los jefes y qué fue lo que los motivó a formar las pandillas al mismo tiempo que se descubren las razones que provocaron la debacle de la sociedad. Como te comentamos, en esta clase de títulos se antepone la jugabilidad a la narrativa, pero algo de historia en esta entrega hace que los enemigos no se sientan planos. De hecho, también hay un cómic web que deja ver como eran los 4 poderosos líderes antes de los hechos del juego.

Una aventura con gameplay desafiante

Pero las pandillas no te dejarán el camino libre para vencer a sus jefes; al contrario, al salir del Distrito Neón, sus miembros no te darán tregua si te detectan y una de las opciones de librarte de ellos es derrotándolos. El combate se basa en ataques cuerpo a cuerpo con un tubo de metal y los movimientos de los enemigos pueden ser de larga o corta distancia según su clase. Este aspecto hace que el juego sea retador, en especial porque la dificultad es predeterminada e intenta emular la de los títulos de la vieja escuela. No hay regeneración de salud, sino que es necesario ingerir alimentos para recuperar los 5 corazones, que se vaciarán con cada golpe recibido. Los alimentos son consumibles, se pueden comprar y sólo pueden cargarse hasta 3 unidades; además, es importante saber cuando usarlos, pues el jugador queda expuesto unos instantes.

Si bien los combates contra los miembros de las pandillas pueden ser demandantes, en especial al principio de la aventura y cuando se reúnen un montón tras de Rick, las batallas contra los jefes y subjefes son las más atractivas, puesto que explotan el uso de las habilidades y exigen al jugador que descifre su patrón de movimiento para saber cuando atacarlos.

La dificultad puede ser alta, pero nunca injusta

Al sistema de batallas se une la exploración del mundo y la resolución de puzzles que permiten acceder a otras áreas y completar misiones. Algunos no son tan difíciles, pero eso no quiere decir que no requieran la atención suficiente. De hecho, hay algunos desafíos de plataformas que pueden representar más problemas que los enemigos en sí, sobre todo porque hay obstáculos que pueden acabar con Rick de un sólo golpe, sin importar que todos sus corazones estén llenos, lo que para algunos en ocasiones puede ser frustrante. Sin embargo, quiero dejar claro que en ningún momento sentí esto como dificultad injusta, pues, al igual que las batallas de jefes, obligan al jugador a prestar atención al entorno y los patrones de movimiento en vez de suponer un reto injusto con problemas ocasionados por un diseño caprichoso, como en Battletoads. Para aligerar el reto, los jugadores pueden guardar su progreso al golpear costales de boxeo, lo que asegura que, si agotan sus corazones en un área, reaparecerán cerca del costal, con todo el progreso hasta ahí guardado. Otra manera de guardar es al cambiar de cuartos.

En cuanto al audio y al arte, se puede decir algo muy positivo. Mecha Studios optó por una estética de pixeles que consiguió en conjunto con una animación muy llamativa de toda la Neon City, que logra comunicar la ambientación cyberpunk con la inspiración de varios elementos de los años 80, entre los que se incluyen los colores neón y ciertas mecánicas del juego. Las melodías también logran retratar la música de los entregas de esta era gracias a los tonos característicos inspirados por el estilo new wave. Algunas pistas se escuchan muy bien y hasta son pegajosas, mientras que a otras la repetición puede desgastarlas un poco.

Inconsistencias de diseño empañaron la exploración

Aunque el estilo artístico es atractivo, la reiteración en el diseño de los entornos puede restar interés en la exploración y hacer que el trayecto de un área a otra sea monótono. A esto se suma que, cuando se han desbloqueado todas las habilidades, pocas cosas incentivan la exploración. Los coleccionables que pueden encontrarse en los niveles son monedas y 2 tipos de objetos que pueden usarse para desbloquear atuendos y drones que ayudan de diferente forma en la aventura. Debido a que están escondidos en los niveles, estos objetos ayudan a que el jugador esté atento para descubrir cuartos secretos.

Las monedas, sin embargo, casi no invitan a explorar, en especial porque se usan prácticamente sólo para regenerar salud. Esto quizá sea muy útil en las fases iniciales, cuando el jugador apenas se adapta a los controles y el combate; no obstante, más adelante sólo se acumulan. Aparte, las únicas maneras de conseguirlas aleatoriamente es en batallas o al cortar el pasto. Recuerdo que sólo una vez usé monedas para comprar un objeto clave de la historia. A excepción de esto, el usuario sólo recurrirá a ellas cuando agote su comida o si quiere revelar puntos de interés en el mapa.

Creo que esto pudo solucionarse si las monedas se hubieran usado para comprar artículos para personalizar la apariencia de Rick o hasta dar más opciones a su estilo de combate. Brindar a las monedas más valor en ese sentido haría al jugador ahorrarlas y ser mejor en las batallas para no invertirlas en regeneración de salud. Incluso se pudieron haber aplicado efectos a las comidas y variar así lo que cuesta cada una, pues, según recuerdo, su precio es siempre el mismo.

El sistema de combate pudo brillar más

Dar la libertad de explorar cualquier sección evita que haya alguna con oponentes de nivel más elevado y en etapas avanzadas del juego el usuario puede llegar a sentir la necesidad de encontrar batallas que exploten sus habilidades como lo hacen los jefes. Es por esto por lo que creo que no le hubiera caído mal al juego un área exclusiva que restringiera el acceso a aquellos sin todos los poderes, en donde pudieran obtenerse monedas u otros coleccionables para incentivar la exploración y las batallas.

Digo esto porque, si bien al inicio puede ser complicado esquivar los ataques enemigos, cuando se tienen todos los poderes es muy sencillo salir victorioso o incluso evadir combates. De hecho, es más probable que pierdas más veces por las secciones de plataformas y obstáculos que consumen todos los corazones de un solo golpe que por los combates con enemigos básicos en una etapa avanzada de la aventura. Incluso, si te va mal en un cuarto, puedes dejarte vencer y revivir sin perder dinero en recuperar salud, pues al entrar a un nuevo cuarto la partida se guarda automáticamente. Quizá una manera de hacer que fuera más desafiante es evitar los puntos de guardado en cada sala y mejor extender el uso de los sacos de boxeo como medios de guardado.

No obstante, hay secciones en las que se brindan interesantes aproximaciones a las batallas. Recuerdo que en una aparecía un enemigo que creaba un velo que volvía invulnerable a otro y esto hacía que se pensara como aproximarse a la pelea. En otra instancia, los poderes de 2 clases de enemigos hacían que en conjunto fueran complicados de vencer porque para evadir a uno necesitabas estar en movimiento, pero había otro que podía paralizarte, lo que hacía complicado encontrar un espacio y agarrarlos con la guardia baja.

Neon City Riders

Una aventura desafiante iluminada por un neón titilante

Tras visitar el título por poco más de 10 horas, puedo decir que cumple con la propuesta de Mecha Studios como experiencia global. La aventura tiene fundamentos artísticos sólidos que acompasan con una dificultad exigente que hace recordar títulos de antaño. El juego padece algunas inconsistencias de diseño y sé que algunas soluciones podrían ser algo demandantes tomando en cuenta que se trata de un desarrollo indie, pero creo que habrían ayudado a mejorar la aventura.

El intento al final es encomiable para Mecha Studios, pues logró materializar sus aspiraciones en un título decente que se adapta a los estándares de la industria y que servirá de experiencia para mejorar en posibles proyectos futuros. Mientras tanto, hay una ciudad fragmentada que te espera para vivir su noche más larga con fortalezas eléctricas abandonadas, húmedas capillas en donde se concentra conocimiento prohibido, androides, ajolotes mutantes y coleccionistas de nostalgia con el deseo de recuperar los rastros de una humanidad perdida.