Nintendo Switch ha representado una segunda oportunidad para la relación de los third-party con las consolas de la compañía japonesa luego del desastre que fue Wii U en ese rubro. Quizá, hoy estamos viendo muchos de los juegos que debieron salir en su momento para la sucesora de Wii pero cuyos lanzamientos fueron cancelados o repensados por su caída. Ahora, el éxito de la consola híbrida ha permitido que algunos juegos que gozaron de reconocimiento en PlayStation 3, Xbox 360 y PC tengan un segundo aire en el mercado, sobre todo porque, más allá de ser ports, el hardware de Nintendo atinó en brindar una experiencia portátil y la tentación por tener este tipo de juegos corriendo en una consola para llevar es mucha. Bajo ese contexto, Volition y Deep Silver decidieron probar suerte de nuevo con Saints Row IV, cuya locura y desenfreno ya están listos para llevar en Switch bajo la nomenclatura Re-Elected.

Saints Row: sobrevivir o desaparecer sin piedad cual clon de GTA

Como franquicia, Saints Row surgió dentro de aquella época que seguía experimentando los efectos del impacto de Grand Theft Auto III, Vice City y San Andreas. La fórmula indicaba que el éxito era alcanzable si se tomaba el camino de los sandbox y la temática criminal en cualquiera de sus variantes. Todos querían ser Rockstar y tener un GTA, de ahí que Volition y el THQ de aquel entonces recibieron el impulso de Microsoft para que Xbox 360 tuviera su propio sandbox de criminales dando inicio a Saints Row.

El tiempo fue implacable con esa tendencia y ya con Saints Row como juego multiplataforma, Volition entendió que la única posibilidad de supervivencia era cambiar y enfocarse en algo específico. De manera que, atinadamente, el equipo de desarrollo pensó en aquello que a muchos nos gustaba hacer después de cumplir con las misiones principales de los juegos de los sandbox de Rockstar: destruirlo todo y dar rienda suelta a la locura. Gracias a esa decisión, Saints Row: The Third y Saints Row IV se convirtieron en 2 de los juegos más divertidos de la séptima generación, pues su irreverencia, libertad absoluta y humor negro terminaron por ser una apuesta irresistible para los jugadores.

Saints Row aposto por la diversión, la irreverencia y la destrucción pura

Al final, Saints Row IV llevó todo el desenfreno hacia el siguiente nivel y como era de esperarse tuvo un relanzamiento en PlayStation 4 y Xbox One con una edición equivalente a una GOTY, o sea con todo el contenido adicional además del juego base, Saints Row IV: - Re-Elected, entrega que hace su arribo a Nintendo Switch y que hoy es la que nos ocupa.

Los Saints como líderes del mundo libre

Para no caer en repeticiones sobre un juego que ha sido reseñado en todos lados, solo me limitaré a hablar de su historia en general y lo que tendrás para llevar en caso de que no conozcas la franquicia. Saints Row IV vio el ascenso de los Saints de la Tercera Calle, pandilla que se convirtió en un fenómeno a nivel social y comercial en la entrega anterior, a los más altos niveles del ejercicio del poder, sí, la presidencia de los Estados Unidos.

Es por eso que al iniciar Saints Row IV Re-Elected y después de una secuencia introductoria, sabrás que estás en el papel del líder de los Saints que ahora despacha nada más y nada menos que en la Casa Blanca. Durante tu gestión, la sede del Ejecutivo de EUA se ha convertido en el centro nocturno que los Saints siempre soñaron y la vida transcurre de lo más normal, salvando al mundo, aprobando presupuestos para curar enfermedades y así. Sin embargo, no pasa mucho para que el presidente, o sea el personaje que puedes editar y personalizar, se enfrente a su mayor reto: una invasión aliénigena orquestada por el emperador Zinyak, quien busca conquistar la Tierra.

Gracias a su tecnología, los aliens han causado una ruptura dimensional que te llevará a una versión virtual de Steelport, la ciudad del juego anterior, donde la realidad y lo que aparenta serlo están mezclados. A partir de ahí, tu misión como líder del mundo libre será acabar con la invasión alienígena y salvar al mundo.

Como podrás notar, la historia que encontrarás en Saints Row IV Re-Elected es un compendio de disparates y ocurrencias, pero muy bien armados y con sentido dentro de la estructura del juego, después de todo, se trata de diversión pura y prácticamente de ser el emisario del caos, la destrucción y la irreverencia.

La diversión está ahí, pero el paso del tiempo no perdona

Saints Row: IV - Re-Elected es un port de la entrega que debutó hace años en PS4 y Xbox One, por lo que puedes esperar el mismo contenido sin cambio alguno, pero eso también significa que en términos visuales y de jugabilidad encontrarás una propuesta que denota su edad y más si has estado jugando títulos actuales. Saints Row IV es un gran juego y tiene merecidas las calificaciones que tuvo en su momento, hoy estamos hablando de su relanzamiento de Switch su rendimiento tomando en cuenta que la versión remasterizada salió hace años en PS4 y Xbox One.

Llevar un juego a Switch no es tan fácil, distintos procesos de desarrollo lo han demostrado y coinciden en todo el trabajo que hay que hacer para que un título corra bien en la consola híbrida, sobre todo tomando en cuenta su característica como sistema portátil. En ese sentido, se sabe que el apartado que más sufre es el visual y en el caso de Saints Row: IV - Re-Elected encontramos resultados inconsistentes.

Saints Row: IV - Re-Elected en Switch puede otorgar postales y despliegues visuales muy buenos que en ocasiones te harán olvidar que estás en la consola híbrida y que se trata de la versión para las otras consolas. Sin embargo, no pasará mucho para que el juego comience a flaquear y los bajones en la tasa de cuadros por segundo se hagan presentes, sobre todo en los combates o aquellas situaciones que muestran mucho contenido en pantalla. Obviamente, la situación no mejora en el modo portátil, pues aunque en ambos modos están asegurados los 30 cuadros por segundo, en 720p encontrarás momentos y detalles que te harán pensar que se trata de la versión de PS3 y Xbox 360.

El paso del tiempo no ha perdonado a Saints Row IV, pero eso no significa que no sea uno de los juegos más divertidos que hay

En los espacios estrechos y cerrados, Saints Row: IV - Re-Elected puede lidiar con sus limitantes a nivel visual, el hecho de que la mayor parte del juego tenga lugar en la noche y entornos oscuros juega a su favor, pero en espacios abiertos y en las secuencias de acción es cuando el título muestra su peor cara, no solo con detalles gráficos que muestran los límites alcanzados por el equipo encargado del port, también por la presencia de bugs que en definitiva recuerdan la peor época de la moda de los sandbox.

Pese a esto, Saints Row: IV - Re-Elected también sabe brillar y hay momentos en los que la estabilidad a nivel visual llega como caída del cielo, permitiendo disfrutar de esta versión virtual de Steelport y de todos los clichés, parodias, bromas y humor negro que el juego sabe lucir para convertirse en una propuesta divertida. De ahí que, en términos generales, Saints Row: IV - Re-Elected para Switch no sea algo imposible de jugar, así que si estás dispuesto a pasar estos detalles, no hay duda de que podrás apreciar los mejores momentos que el juego es capaz de ofrecer.

En términos de audio, sin duda se agradece que Saints Row: IV - Re-Elected mantenga las estaciones de radio con la música de licencia suficiente para complacer gustos de todo tipo y para aderezar este recorrido de destrucción y diversión con temas de britpop, rock pesado, hip-hop y electrónica.

El sandbox más loco, ahora para llevar

Con sus pros y sus contras, Saints Row: IV - Re-Elected mantiene su esencia en cuanto a diseño y mecánicas y eso significa que los usuarios de Switch tendrán a la mano un mundo bastante grande para disfrutar. Y es que esta entrega cuenta con un buen número de misiones, tanto principales como secundarias, y distintas cosas por hacer en materia de coleccionables para aquellos que buscan completar el juego al 100%. Uno de los aciertos de la entrega original y por ende de este relanzamiento es que te deja jugar a tu ritmo y prácticamente no hay limitantes, fácilmente puedes perderte en Steelport para hacer lo que te plazca sin tener que cumplir con algo en específico.

Saints Row: IV - Re-Elected cuenta con los elementos básicos de un sandbox con temática criminal, o sea que hay un arsenal importante a disposición y más tratándose de una propuesta que toma cualquier locura y la añade al producto final. Asimismo, el robo de automóviles y motocicletas está a la orden del día, aunque también lo es el acoso de la policía pues debes saber que en esta versión virtual de Steelport, creada por la Matrix, los agentes del orden son bastante sensibles y dar un paso en falso es suficiente para que vayan por ti.

De la misma forma, si no conoces el juego debes saber que Saints Row: IV - Re-Elected, al tener lugar en medio de una invasión alienígena, da paso a todo tipo de locuras y eso significa que, al menos en el mundo virtual, pues también hay uno real en el juego, puedes conseguir distintos poderes que van desde la posibilidad de congelar a los enemigos, saltar grandes distancias e incluso dar un golpe equivalente a la potencia de un bajo que pondrá a bailar a los enemigos antes de eliminarlos. De ahí que en términos de mecánicas, el juego se desenvuelva entre la combinación de golpes, disparos y poderes para lidiar con enemigos, aliens y jefes que no son tan difíciles y que prácticamente están ahí para que te luzcas, lo cual es divertido pero puede ser que para algunos se torne repetitivo.

Ahora bien, ¿qué pasa en cuanto al control? Dado que Saints Row: IV - Re-Elected mantiene las mecánicas y el control de la versión original, quizá con algunos ajustes, es posible que te encuentras con una experiencia que te incomode al inicio pues el control no es tan responsivo como uno quisiera, en parte por el diseño del título y en parte por las limitaciones en materia de optimización para la consola híbrida.

A partir de mi experiencia, considero que no es un juego para usar con los Joy-Con, incluso el menú de opciones muestra el mapeo de botones para un Switch pro Controller y puede ser que esa sea la mejor opción para jugarlo.

¿Esto significa que es injugable? No, pero debes tomar en cuenta que estamos hablando de un juego con diseño y mecánicas pensadas para la séptima generación y que en la versión de Switch, sobre todo en su modo portátil y si lo juegas con Joy-Con te será difícil adecuarte al esquema de control, aunque con el paso del tiempo podrás dominarlo pero jamás te encontrarás con una jugabilidad digna del recuerdo, sobre todo porque en la movilidad del personaje llega a ser mala.

En lo general, la jugabilidad de Saints Row: IV - Re-Elected se mantiene en un nivel promedio y por más opciones que tengas para ajustar el control será difícil que alcances un punto de equilibrio que te haga olvidar este detalle pues siempre habrá un pero. No puedo negar que con la motivación a tope y más por pensar en que tienes Saints Row IV en portátil hay posibilidades de que pases por alto las limitaciones y los detalles de este port, pero si no es así será complicado que te enganches con él, lo cual es una pena porque es una experiencia divertida que ofrece horas de sana violencia e irreverencia.

Conclusión

Si bien Saints Row: IV - Re-Elected es una mejor entrega que lo que fue Saints Row: The Third en Switch, la realidad es que la franquicia sigue debiendo con sus ports para la consola híbrida y esto invita a consumir esta edición en otras plataformas para vivir la experiencia a tope. Pese a esto, este port mantiene la esencia que ha permitido que Saints Row sobreviva y si estás dispuesto a lidiar con los aspectos negativos y no eres tan exigente en términos de control, bien puede representar una opción interesante para llevar en tu Switch gracias a que es capaz de brindar algunos buenos ratos de diversión.