El formato físico va de salida en los videojuegos y el que fuera, quizá, el último bastión en su forma tradicional, Nintendo, cedió ante las necesidades actuales del mercado. Durante la presentación de Switch 2 se revelaron detalles sobre las tarjetas de datos de la consola que no caerán bien a los fans de los juegos físicos tradicionales.
Las tarjetas de Switch 2 no incluirán el juego completo y solo serán llaves de acceso
Durante la presentación de Switch 2, Nintendo presentó las nuevas tarjetas de juego. En el caso de los títulos desarrollados para la consola o ports que aprovecharán su poder, se trata de piezas en rojo con un diseño similar a las originales.
Sin embargo, una mala noticia llegó momentos después. La compañía japonesa informó que estas tarjetas no tendrán el juego completo y será necesario descargar la totalidad de datos para su funcionamiento.
Explícitamente, Nintendo aceptó que las versiones físicas de los juegos de Switch 2 serán así. Prácticamente funcionarás como llaves de acceso para poder jugar, esto pese a que el juego esté instalado en el almacenamiento de la consola.
“Las tarjetas de juego son diferentes de las tarjetas normales, porque no contienen los datos completos del juego. En cambio, la tarjeta funciona como llave del juego, es su “clave” para descargar el juego completo a su sistema a través de Internet. Una vez que se haya descargado, puede jugar insertando la tarjeta en su sistema e iniciándola como una tarjeta de juego física estándar”.
Nintendo sobre las tarjetas de switch 2
¿Es el fin del formato físico tradicional en Nintendo?
Lamentablemente, sí. Nintendo tomó la decisión de que todos los juegos físicos de Switch 2 tengan esta característica como simples llaves de acceso para descargar el juego y poder jugar.
Si bien no se trata de algo nuevo, pues ya se hacía con algunos juegos en Switch y también con las formas de verificación y acceso en PlayStation y Xbox, trasciende que Nintendo fuera el último en ceder.
Información reciente revela que los juegos físicos de Switch 2 podrían tener un costo de $90 USD, $10 dólares más que las versiones digitales que apuntan a $80 USD.
Los jugadores ya se cuestionan en redes sociales si vale la pena pagar $10 dólares más por una tarjeta de juego que está muy lejos de ser un formato físico real en materia de videojuegos.
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