Los años recientes son de crisis para la industria de los videojuegos con despidos, cierres y cancelaciones. Sin embargo, la situación parece empeorar pues proyectos en marcha se quedan sin financiamiento y están en riesgo, como el primer videojuego de la compañía de un veterano de Xbox y Halo.
Jar of Sparks, compañía fundada por veterano de Xbox y Halo, se queda sin financiamiento
Tal parece que unir fuerzas en busca de nuevas oportunidades y propuestas no es suficiente para la industria de los videojuegos en la actualidad. Muestra de ello es el problema grave que atraviesa Jar of Sparks, empresa fundada por Jerry Hook en 2022 con apoyo de NetEase como editor cuyo primer videojuego apuesta por la acción y la narrativa.
De acuerdo con un comunicado que se publicó en LinkedIn (vía VGC), los líderes del estudio informaron que se quedaron sin financiamiento. No tienen apoyo de un editor pues NetEase terminó la relación con el estudio y por ende suspendieron el desarrollo de su primer título.
Al respecto, se menciona: “notificamos a nuestro equipo que Jar of Sparks detendrá el trabajo en nuestro título actual mientras buscamos un nuevo socio editorial que pueda ayudar a dar vida a nuestra visión creativa”.
Asimismo, los directivos de la compañía invitaron a editores a revisar los avances del primer videojuego para negociar un acuerdo de publicación, pero es un hecho que mientras eso no suceda, el proyecto seguirá sin avanzar.
¿Qué es Jar of Sparks?
Jar of Sparks es una compañía fundada en 2022 por Jerry Hook, creativo que fue parte del desarrollo y lanzamiento del primer Xbox, así como del reconocido servicio en línea Xbox Live.
Posteriormente, Jerry Hook ocupó puestos directivos relacionados con Halo y su trabajo más reciente con la franquicia que pasó de Bungie a 343 Industries fue como jefe de diseño del malogrado Halo Infinite.
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Tras finalizar su etapa en Xbox y con una de sus principales franquicias, el creativo y directivo incursionó con su propia compañía, Jar of Sparks. Sin embargo, esto sucedió en un periodo en que la industria de los videojuegos era objeto del deseo de inversionistas con capital de riesgo que apostaron por el gaming durante la pandemia. Hoy, ese dinero no corre más en la industria y diversos proyectos se quedaron sin financiamiento.
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