Llegamos a un punto crítico en el control de la pandemia. Ahora más que nunca es importante seguir al pie de la letra las medidas sanitarias para evitar todo contagio de coronavirus (COVID-19) en esta etapa. Para que no desesperes y te mantengas entretenido en casa, el staff de LEVEL UP te compartimos algunos títulos que no debes dejar pasar.
Esta semana tuvimos horror monocromático World of Horror, recordamos uno de los mejores spin off con Metal Gear Rising: Revengeance, conocimos el legado de Big Boss en Metal Gear Solid 3: Snake Eater y acompañamos a Toon Link por altamar con The Legend of Zelda: Wind Waker. Con tantos clásicos, me motivé a revivir uno de los juegos que más disfruté cuando tenía mi PlayStation, me refiero al inigualable Castlevania: Symphony of the Night.
La semana pasada les hablé de The Messenger, título independiente que retoma las ideas de clásicos como Ninja Gaiden, pero principalmente de títulos del género conocido como Metroidvania. Dicho término parte de las mecánicas instituidas en Symphony of the Night, lo que incluye la posibilidad de explorar un mapa con libertad; obtener items para seguir progresando; regresar a puntos visitados con anterioridad; elementos RPG y muchos elementos más que definieron el rumbo de títulos futuros. Un paradigma que marcó las reglas del género en 1997.
Sabemos que Metroid es la otra parte en la fórmula pero Symphony of The Night no solo se recuerda por sus aportaciones en el género, su brillo es propio y se puede hacer una larga lista de las cosas que hizo bien. Para empezar, la dirección de arte a cargo de Ayami Kojima dio un giro único a la serie, y es que, la mezcla de belleza andrógina con una vibra gótica crearon una imagen más poderos de aquellos sprites vistos en pantalla. Aunque unos años más tarde Takeshi Obata (quien se diera a conocer por sus diseños en Death Note) sorprendiera por su participación en Castlevania Judgment, considero que el pincel de Ayanami encaja más con la naturaleza vampírica de la franquicia.
Hablando de diseño, los escenarios y mazmorras que recorreremos en esta aventura 2D son en su mayoría cerrados pero increíbles. Algunos fondos aprovechan el uso de parallax para ofrecer un efecto 2.5D que sorprendió a los jugadores de hace más de 20 años. Además del apartado visual, el castillo de Dracula guarda muchísimos secretos, algunos no tan lógicos y otros que solo están ahí para impresionarnos. Un hecho que se disfruta y te motiva a analizar con lupa cada esquina del mapa. Que por cierto, guarda una dualidad en su interior que descubrirás en algún punto del juego.
A diferencia de sus predecesores, el personaje principal, Alucard, no era humano y fue creado para ser cool por naturaleza. Su origen se puede intuir por su nombre y es que, es un evidente anagrama de Dracula. Esta peculiaridad se explotaba con habilidades únicas como transformaciones, hechizos, invocaciones y poderes sobrehumanos que nos ayudan a avanzar por todo el castillo de Dracula. Pero eso no es todo, durante esta aventura iremos recolectando todo tipo de armamento mientras mejoran las estadísticas de nuestro personaje, esto a través de un esquema clásico de RPG donde los números pueden variar a partir del nivel que tengamos y nuestro equipo. Además de estar ocultas por todo el escenario, también podremos obtener armas después de destruir a algunos enemigos, pero el porcentaje de dropeo depende de cada criatura y la rareza del arma. Esto quiere decir que pasarás mucho tiempo haciendo pedazos al mismo monstruo una y otra vez hasta obtener el item deseado. Aunque es tedioso, la recompensa valdrá la pena y añadirá más tiempo a las cerca de 8 horas que nos tomará terminar el juego sin completarlo al 200% o más.
"What is a man? A miserable pile of secrets"
Los sucesos ocurridos en Castlevania: Symphony of The Night se desarrollan después del final de Rondo of Blood, de hecho, literalmente tendremos que revivirlo al inicio de esta historia y averiguar que le ocurrió a Richter Belmont. Tomaremos el control de Alucard y, después de ser asaltado por la muerte buscaremos el origen de la aparición irregular del castillo y ponerle fin una vez más a las fuerzas demoníacas de Dracula. La historia estará acompañada de algunas actuaciones de voz que no son de lo mejor pero que le da valor al juego más allá de leer los diálogos en pantalla. La música por otro lado, es excepcional e incluye la que es sin duda la mejor versión de Bloody Tears entre otros temas inolvidables.
Castlevania: Symphony of The Night es una obra maestra que Toru Hagihara y Koji Higarashi le heredaron al mundo de los videojuego y precursor de un género que sigue vigente, incluyendo Bloodstained: Ritual of The Night, el más reciente trabajo de Igarashi. Si por alguna razón no lo has jugado, este es un buen momento para darle una oportunidad y enamorarte de Castlevania de la mejor manera. Si estás interesado en revivir el legado de Alucard, puedes encontrar Castlevania Symphony of The Night en su versión retrocompatible con Xbox One, en un paquete que incluye Rondo of Blood para PS4 y en dispositivos móviles a través de Android y IOS.
No olvides visitar nuestra sección llena de recomendaciones. A continuación te dejamos algunos títulos que no debes dejar pasar y puedes jugar durante esta cuarentena:
Fernando Salinas ― Granblue Fantasy: Versus, un bello juego de peleas, sencillo pero sólido en su ejecución
Mardokeo Galván ― Darksiders, en busca de la redención en el fin del mundo
Pedro Cesari ― Snake Pass, un plataformero sin piernas, pero mucho movimiento
Luis Sánchez ― Tibia y el primer dragón que nunca olvidarás
Daniel Laguna ― Sleeping Dogs, una operación encubierta en Hong Kong
Víctor Rosas ― The Last of Us, un regreso necesario para comprender lo que viene
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