Como bien pronosticó el analista Michael Pachter hace un par de días, las cifras de venta de la industria de los videojuegos en Estados Unidos durante agosto se vieron seriamente afectadas por el retraso de Madden NFL 12, conduciendo a otro mes negativo en todos los frentes; así lo confirmó el grupo de investigación de mercados, NPD.
La recaudación total fue de sólo $669 millones de dólares (USD), número que palidece ante los $873 millones de agosto de 2010. Por su parte, la venta de juegos cayó estrepitosamente de $403 millones durante el mismo mes del año pasado a $285 millones este año.
Lógicamente, el PlayStation 3 vio un pronunciado repunte en el departamento de hardware debido a su reciente recorte de precio (no se reveló exactamente de cuánto), pero no bastó para arrebatarle el liderato a la plataforma de Microsoft, la cual despachó más de 300 mil unidades. Otro ganador fue el 3DS, sistema que también bajó su costo y gracias a ello escaló de 185 mil a 235 mil unidades vendidas. Finalmente, el Wii cayó 22.2% y se ubicó en el cuarto escaño con 190 mil consolas.
Independientemente de la competencia entre plataformas y sus estadísticas individuales, en conjunto, la venta de hardware vio una contracción de 12% ($294 millones de dólares estadounidenses).
Finalmente, los juegos más vendidos fueron Deus Ex: Human Revolution, seguido por el único título de futbol americano disponible durante este periodo, NCAA Football 2012, y Call of Duty: Black Ops que, a casi un año de haber sido lanzado, sigue arrojando cifras elevadas de ventas.
Queremos suponer que agosto será el último mes negativo para la industria, pues durante septiembre hacen su arribo los dos juegos de futbol soccer más populares, FIFA 12 y PES 12, así como Resistance 3 y Gears of War 3. Al margen de lo anterior, sería recomendable que la industria en su conjunto analizará qué se puede hacer para mejorar el desempeño comercial del entretenimiento electrónico durante la mitad del año; no puede ser que, como subrayamos durante la semana, este dependa de un sólo juego: Madden NFL.
Recientemente ha crecido la noción de que ya no hay lugar para juegos medianos, sólo súperproducciones, pero ante el escenario aquí expuesto, los desarrolladores pequeños que lanzan títulos de menor envergadura podrían aprovechar los meses entre mayo y agosto, favoreciendo así tanto a la industria como a sus propias finanzas, en vez de que todos se vuelquen sobre diciembre.
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